Los Cinco Minutos de María |
María Santísima presenció la muerte del Hijo de Dios pero con una firmísima fe y convicción de que luego resucitaría y viviría. Aquella fe de María sostuvo a los discipulos del Crucificado.
Tú también debes ser ante el mundo el testigo de la resurrección del Señor, debes ser el convincente testimonio de que Dios vive y actúa en el mundo a través de tu vida. Dios vive y vive en tí, vive en tí, porque tú lo das a conocer al mundo, que de otra manera podría pensar que Dios ha muerto y ya no actúa en los hombres.
Como María Santísima, confirma a tus hermanos en la fe y en el amor.
María nos enseña lo que ella aprendió alk pie de la cruz: que elñ dolor cristiano es redentivo.
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